22 feb 2012

Ser de dos pueblos tan distantes y distintos

TRES MINUTOS CON EL IDIOMA
 Por Nelo Solo


Cita: “girardoteño, -a 1. m/f E- Habitante de Girardot, en el → departamento de Cundinamarca. 2. adj. E- Relativo a o propio de Girardot, en el → departamento de Cundinamarca”.
Haensch, G. y Werner, R. Nuevo diccionario de americanismos. Tomo I Nuevo diccionario de colombianismos. Santafé de Bogotá, Instituto Caro y Cuervo, 1993.


Lo bueno del correo electrónico es que los mensajes nunca se van para Girardot. En más de una ocasión ha sucedido que Adpostal envía a Girardot una correspondencia que es para Girardota. ¿Qué pasa, pues, con nuestro gentilicio?


En la formación de gentilicios, la enciclopedia  idiomática  dispone  de  varios  sufijos:  -eño,  -ano, -ino, -ense e -ita. Cuando una casilla sufijal ya está ocupada, los que llegan de segundos deben optar por uno de los sufijos disponibles. Veamos algunos casos.

1) Los nativos de Santafé de Antioquia no son santafereños ni santafesinos, porque esa casilla está(ba) ocupada por Santafé de Bogotá. No son antioqueños, porque esa casilla pertenece al departamento. Alguien sugirió que cuando les preguntaran que ustedes qué son, dijeran que ‘doblemente antioqueños’.

2) Los nativos del Estado de México, en la República de México, sintieron la misma dificultad. La Academia Mexicana de la Lengua les sugirió que se hicieran llamar ‘mexiquenses’ por el Estado y ‘mexicanos’ por la Confederación de Estados; y que los de Ciudad de México o Distrito Federal (D.F.), se hicieran llamar ‘defeños’.

3) Los nativos de Manizales se incomodan cuando alguien los trata con el gentilicio ‘manizalita’. Lo asocian ellos con el gentilicio bíblico israelita, y entonces prefieren ‘manizaleño’.

Al asumir con orgullo el sufijo “–ano” para nosotros los girardotanos no debe llevar a discusiones bizantinas sobre el eventual travestismo del prócer Atanasio Girardot; ni sobre la disonancia entre el masculino pueblo y el femenino Girardota, que llevaría a cambiar el nombre de Girardota por Ciudad Girardota. Esa discusión ya se dio en Ciudad Bolívar, y demostró que no por llamarse Ciudad, Bolívar sea una ciudad.

Quedémonos con pueblo y sintámonos puebleños, a mucho honor. Que estamos a media hora de Medellín, vale; que somos área metropolitana, vale; que tenemos seis cajeros electrónicos, vale; que llega toda la prensa nacional los domingos, vale. Pero seguimos siendo pueblo, como cuando Los Panchos cantan que “Me voy pal pueblo / hoy es mi día / voy a alegrar / toda el alma mía…”. A los de Ciudad Bolívar les dejamos el Lamento borincano de Marc Anthony: “Sale loco de contento / con su cargamento / para la ciudad”.

La nueva entrada del Diccionario de colombianismos queda, entonces, así: girardotano, -a 1. m/f E- Habitante de Girardota, en el → departamento de Antioquia. 2. adj. E- Relativo a o propio de Girardota, en el → departamento de Antioquia.


1 comments:

Anónimo dijo...

Gracias por la aclaración... yo a cada rato me preguntaba porqué el ano y el eño, y vea... aqui me lo respondieron...

Otra cosa: el Lamento Boricano tiene versiones interpretadas por maestros de verdad (Daniel Santos, Victor Hara)... Para que salga usted con ese canson de Anthony. Sirve para algo más que informar esta chimenea tan importante que ha sido para los girardotanos.