22 nov 2011

Una artículo vetado


Las consignas de las campañas por la Alcaldía de Girardota.

Por Víctor Villa Mejía

La política es la actividad que tiene que ver con el devenir y el porvenir de la polis. Los términos pueblo, poblado, población y política se derivan todos de polis. Los  discursos de la política tienen su mínima expresión en las consignas. Una consigna es una síntesis de la visión que los políticos tienen, en un momento determinado, de una comunidad específica. 


Las campañas políticas por la alcaldía popular son una magnífica oportunidad para saber qué cosmovisiones se han configurado sobre el pasado y el futuro de una municipalidad situada y fechada, como Girardota en este caso.

La palabra consigna se aplica a las percepciones que los equipos interdisciplinarios tienen de las comunidades que se pretenden gobernar a través de las Alcaldías Populares. Consigna se compone de un prefijo: co-, que significa mutuo, compartido; y un sustantivo: -signo, que significa representación de una idea. Un emisor colectivo, llamado en este caso campaña, propone un ideal a unos receptores, llamados electores, para que compartan ese ideal y, en consecuencia, voten por dicha consigna: al votar por la consigna se está votando tanto por el candidato como por la organización política que arropa a los alcaldes candidatos y a los concejales comprometidos con cada campaña.

Para el período 2012-2016 se han propuesto siete consignas, por sendos aspirantes a la Alcaldía Popular. Dichas consignas son: 1) Liderazgo, compromiso y renovación… 2)       Girardota avanza… 3) Transparencia y desarrollo para Girardota…4) Elija el cambio en Girardota… 5) Construyamos a Girardota… 6) Todos por una Girardota próspera, culta y con conciencia ética… 7) Gestión y progreso para volver a creer… Veamos qué dice, más allá de la formulación textual, cada consigna.

Consigna uno: LIDERAZGO, COMPROMISO Y RENOVACIÓN

Esta consigna está hecha de tres sustantivos abstractos. Los dos primeros (liderazgo y compromiso) aluden al candidato –al que llamaremos sujeto– y el tercer sustantivo (renovación) se refiere a la administración municipal –a la que llamaremos objeto–. Este tercer eje semántico introduce de manera implícita la oposición renovación-innovación, para significar que se va a tomar lo nuevo y efectivo de anteriores administraciones y no necesariamente lo inédito, referido por la palabra innovación. Esta consigna, al igual que la número siete, no menciona a Girardota porque seguramente los creativos de la campaña lo consideraron redundante.

Consigna dos: GIRARDOTA AVANZA

El modo gramatical de esta consigna es el indicativo. La pragmática denomina a estos enunciados ‘constatativos’, para indicar que hay un sujeto –colectivo en este caso– que certifica el avance y la transformación de esta comunidad. En realidad los constatativos no proyectan nada, a diferencia de los preformativos; pero la consigna implica que al constatar que Girardota avanza, su alcalde forzosamente tiene que ser de ‘avanzada’ y, efectivamente, eso es lo que dice la consigna. De las siete consignas ésta es la más comprimida, sin que ello implique que lo sintético se opone a lo analítico, ni que lo detallado se oponga a lo condensado.

Consigna tres: TRANSPARENCIA Y DESARROLLO PARA GIRARDOTA

Al igual que la consigna uno, el campo semántico de la ‘transparencia’ es asignado al sujeto, es decir al candidato; y el campo semántico de ‘desarrollo’ al objeto, o sea el municipio de Girardota; con la alusión a la transparencia la campaña pretende salirle al paso a la contaminación de la oscuridad u opacidad en que presuntamente habrían caído anteriores administraciones. Por su parte, el campo semántico del desarrollo es casi obvio en estas campañas, a condición de que por desarrollo se entienda progreso y mejor estar, máxime que en politología existen precisamente teorías centradas en el desarrollo, en tanto aspiración justa y necesaria de toda campaña política.

Consigna cuatro: ELIJA EL CAMBIO EN GIRARDOTA

Esta consigna utiliza el verbo más indicado para la acción esperada de sus destinatarios: votar, es decir, elegir; por eso recurrió al modo gramatical llamado imperativo. El sustantivo ‘cambio’ podría tener dos acepciones: de un lado, explicitar una especie de inconformismo con las anteriores administraciones; y de otra, proponer maneras diferentes de administrar. Esta polisemia es normal, e incluso inducida, porque el elector queda en libertad de traducir ‘cambio’ por lo que más le convenga, como seguramente sucede con la palabra ‘transparencia’ de la anterior consigna. 

Consigna cinco: CONSTRUYAMOS A GIRARDOTA

El modo gramatical recurrido por esta consigna es el subjuntivo. Este modo gramatical es el utilizado por las invitaciones, las sugerencias y las proposiciones. La consigna se inscribe en la teoría pedagógica del constructivismo (Piaget) y en la teoría semiótica de la deconstrucción (Derrida). Esta consigna es profundamente heraclitiana, en el sentido de recordar que nadie se baña dos veces en el mismo río y, en consecuencia, cada administración debe traer nuevas opciones y nuevas oportunidades, ajustadas a la evolución geopolítica de la municipalidad. Mirada esta consigna desde la poesía, podría decirse que es el gran Machado su inspirador: “Caminante no hay camino, se hace camino al andar”.  

Consigna seis: TODOS POR UNA GIRARDOTA PRÓSPERA, CULTA Y CON CONCIENCIA ÉTICA

Al igual que la consigna uno, esta consigna se apuntala en un trípode conceptual: la prosperidad, la culturidad (urbanidad) y la eticidad. En realidad, son tres categorías pensadas para el objeto –la comunidad girardotana– en que el sujeto proponente pareciera apropiarse para sí solamente de la cultura y la eticidad, dejándole al objeto la prosperidad. Es posible que para esta consigna la opción metodológica sujeto-objeto no sea la más adecuada; se requeriría otra opción metodológica más precisa, y esa es la alternativa semántica sujeto-paciente. Siendo el sujeto el alcalde, el paciente es la comunidad, para la cual se propone la prosperidad, la cultura y la conciencia ética. Esta consigna, al igual que la cultura metro, pretende nivelar por lo alto: así lo respaldan los estudios demográficos y sociológicos llevados a cabo por los investigadores de la campaña.  

Consigna siete: GESTIÓN Y PROGRESO PARA VOLVER A CREER

Esta consigna es una frase preposicional, dividida en dos por la preposición ‘para’. La primera parte abandona las triadas (“liderazgo, compromiso y renovación” de la consigna uno y “prosperidad, culturidad y eticidad” de la consigna seis) para instalarse en la díada “gestión y progreso”; el campo semántico de la ‘gestión’ es el mismo de la gestación, la innovación y la creación; por su parte el campo semántico de ‘progreso’ está indicado por el prefijo pro-, para indicar que se está a favor del progreso y que los demás prefijos –in(greso), e(greso), re(greso), con(greso)– son también posibles en la consigna, porque ‘greso’ es desplazamiento, movimiento, andanza; como cuando Sancho le dice a su Quijote que si oye ladrar los perros, y el Quijote le responde que sí porque ‘caminamos amigo Sancho, caminamos’; de otro lado, la palabra ‘progreso’ está muy acendrada en la mentalidad girardotana, por cuanto el emblema de la municipalidad es precisamente “Girardota: municipio de fe y progreso”, puesto justo a la entrada de Giradota. La segunda parte de la consigna asegura que la gestión y el progreso son para ‘volver a creer’; creer viene del latín credere, que se puede traducir como confiar, cuya esencia es el sustantivo fe, el mismo que está es fehaciente, confidente, fiador, fidelidad y confianza. Dos versos de un bolero de Los Panchos compendia esta segunda parte de la consigna: “Tú tienes que ayudarme a conseguir la fe que con engaños yo perdí / me tienes que ayudar de nuevo a amar y a perdonar…”; eso es lo que probablemente los creativos de la campaña les quieren decir a sus virtuales electores.       

Luego vienen las subconsignas (consignas menores) de los candidatos al Concejo. Estas comparten los haces de significación de la consigna del candidato a la Alcaldía que los arropan. Las consignas de los concejales potenciales exhiben cierto nivel de concreción y mencionan el locativo Girardota, como las siguientes: Por una Girardota deportiva con dignidad, A seguir trabajando por Girardota, Con la camiseta puesta por Girardota, Por una Giradota transparente y con fe y De la mano de la gente por una Girardota diferente.

Las consignas, al igual que los eslóganes del ámbito comercial y los lemas de las campañas cívicas, terminan convirtiéndose en distintivos o divisas, a modo de santo y seña de las siete campañas que buscan lo mejor para Girardota, de lo cual dan cuenta los siete programas divulgados profusamente entre la población votante del Municipio. Todas las consignas son válidas para la elección del alcalde popular de Girardota; pero en el interesante juego de la democracia triunfará la que más convenza, persuada y seduzca a los interpretantes de tan compleja discursividad encarnada en las anteriores consignas; triunfo que deberá ser certificado por las urnas, porque los votos son superiores a las buenas intenciones. 
 

Girardota, octubre de 2011


3 comments:

catalina villa jimenez dijo...

Tan cierto como que en la discursividad esta el voto. La realidad es que cuando uno como votante se acerca al candidato, normalmente lo hace a traves de la palabra escrita, porque es muy cierto que pocos son los sujetos que se dedican a hacerle el seguimiento discursivo al candidato para ver si realmete es y dice lo que uno espera de él.
En la actualidad el candidato ya no "se lo come a uno de cuento" sino en lo que escribe y en el slogan, si bien es cierto que será el fantasma verbal que le asedie durante el ejercicio de la alcaldía, considero que es mucho mas valiente el candidato que se compromete a gestionar a favor del pueblo que aquel que da muestras de su megalomanía invitando al triunfo y al cambio y al progreso, como si esto dependiera del sujeto!

MAURICIO LOPERA SANCHEZ dijo...

este espinoso tema visto al tenor de la filosofia es muy DIGERIBLE pero no es asi y para demostrar lo dicho, lo invito a que pongamos el cronometro en CERO para detenerlo a los 36 meses para mirar en qu se refleja desde el punto de vista de los veneficios para la ciudadania, amanecera y veremos

Anónimo dijo...

beneficios no veneficios