Concejo responde a críticas: entrevista con Hernan Torres

El pasado mes de julio, muchos se sorprendieron ante el rumor de una citación que la Fiscalía General de la Nación había hecho a los 13 concejales de Girardota. La noticia se extendió de inmediato, e igualmente las especulaciones.

El caso se remonta al mes de Abril,  en el que varios ciudadanos radicaron  un oficio ante el Concejo municipal, con el fin de advertir la inconveniencia de nombrar al señor Guillermo Vélez como personero, esgrimiendo argumentos de carácter ético, dadas las cercanías políticas y fraternales del postulado, con el Alcalde Ortíz.

Dicho documento fue leído en la sesión del Concejo, ante el cual el concejal Diego Uribe, además de  proponer que se establecieran filtros que impidieran llegar a las sesiones documentos que, al decir de él, no fueran competencia del concejo, opinó que ese documento “no parece un derecho de petición, sino un pasquín”.

Estas  últimas palabras merecieron la atención atenta de los ciudadanos firmantes del documento, dado que representaba una descalificación,   una clara lesión propinada al derecho de todo ciudadano de participar en el devenir político y administrativo de su municipio, máxime cuando el mismo Concejo en varios comunicados públicos, ha invitado a la comunidad a participar activamente.

El encuentro se dio el 17 de julio en la Fiscalía de Copacabana. Los 13 concejales, como denunciados y los 6 ciudadanos como querellantes, ellos son: Reinaldo Zapata, Julio Osorno Piza,  Castor Gutierrez, Gustavo Delgado, Israel Jiménez y Fabio Carmona.  Como vocero de este último grupo fue designado el Señor Julio Osorno, y de los 13 concejales el señor Diego Uribe.

  

No hubo conciliación.  El  acta dice que por parte de los querellantes no se quiso llegar a ningún acuerdo, puesto que el concejal Diego Uribe  manifestó una posible contrademanda contra ellos. Por su parte, Uribe manifestó que no dijo en plural pasquineros, y que su denuncia es a título personal contra Gustavo Delgado. Concluyó la Fiscalía que no hubo fórmulas de arreglo por lo que declaró fracasada la diligencia.

Habla el Presidente del Concejo.

Pueblo: Independiente de quiénes sean a título personal, son unos  ciudadanos expresando un descontento frente a la decisión de los concejales de nombrar a Vélez como personero sabiendo de su cercanía con alcalde. Es un documento firmado, por lo tanto no es un pasquín. ¿Cuál es su visión?

Hernán Torres: Ante dicha petición, se creó una comisión para contestar con base en la Constitución colombiana. Somos una autoridad elegida para nombrar un cargo público. Que se nos pida que no elijamos es extraño porque dentro de los 40 derechos fundamentales de la Constitución, se consagra el derecho de los ciudadanos a elegir y ser elegidos. Un servidor público sólo puede hacer lo que este en la ley, y lo tiene que cumplir. Desde la ley, el señor Vélez, no tiene ninguna inhabilidad ni incompatibilidad. Nosotros no podemos inventarle incompatibilidades e inhabilidades a nadie. En lo estrictamente partidista, Vélez y Ortiz no militan en el mismo partido.

Por otro lado la responsabilidad del Concejo es colectiva desde el punto de vista de la decisión, pero es individual cuando se viola el derecho de personas, como la calumnia. Ahí ya no es corporativa, es individual. Si un concejal hace un tiro al aire, no se puede investigar a todo el Concejo, sino al que hizo el tiro.

Pueblo: Pero el argumento de ellos era ético y no jurídico. Decían que si el personero hacía control político, ¿como lo iba  a hacer Vélez sabiendo que todo mundo conoce sus cercanías con el Alcalde?  

Hernán Torres: El Personero no hace control administrativo ni político frente al Alcalde. Eso fue derogado. El Personero es un empleado público que se encarga de que prevalezca el interés general, defiende los derechos humanos, y vigila la conducta oficial de los servidores públicos municipales. El Personero no puede investigar a los concejales y alcaldes. Él puede denunciar,  remitiendo a la Procuraduría. El control político es de los concejales. Él lo que hace es vigilar la conducta oficial de los funcionarios y del Alcalde desde el punto de vista de que estén cumpliendo con la Constitución y con la ley. Pero el control administrativo por parte del personero fue derogado hace muchos años. La piedra angular del derecho público es la presunción de buena fe.  Presumir que Vélez no va a cumplir  su función es presumir la mala fe. 

Pueblo:¿Y  frente a la descalificación del señor Diego?

Hernán Torres: Él, en una actitud loable, dijo que la cuestión era suya con el señor Gustavo Delgado. Yo estoy seguro que él no está pensando en el grupo completo, sino en Gustavo Delgado. Tal vez él no dimensionó que ahí había otros ciudadanos.

Pueblo: Por otro lado, en una carta firmada por los mismos ciudadanos se cuestiona el acuerdo 007 en el que le dan la potestad  al Alcalde para hacer la reforma administrativa. Dicen que ustedes le entregaron un cheque en blanco para arreglos burocráticos, y que los concejales no hacen control político. ¿Qué tiene qué decir frente a esto?

Hernán Torres: La carta hasta cierto punto me gusta. Porque reconocen que la facultad otorgada está dentro de la ley. Pero luego dicen que es para postrarse ante el clientelismo y la burocracia. Porque nosotros en un análisis que hicimos miramos la historia del municipio, y las últimas 4 reestructuras el concejo ha entregado sus facultades al Alcalde.   Si miramos a Medellín o Envigado, cualquier municipio, el Concejo se despoja de esta facultad porque constitucionalmente lo puede. Segundo, porque es una realidad del país.  El tema se debatió. En el acta expliqué que debíamos seguir haciendo control frente a la reestructura. El Alcalde nos ha dado informes de cómo va la reestructura. Hay un desconocimiento del Decreto 019 del 2012 cuando se refiere a los estudios previos, dice que las reformas de la planta de personal debe basarse en estudios previos elaborados por las entidades bajo la dirección de la ESAP. La ley 1454 establece que el tema de la reestructura es competencia del municipio, ni siquiera tiene que ir a una autoridad nacional, sino que es propio de cada municipio. Se adolece de una buena información. El Concejo tiene la  potestad de otorgar facultades pro-témpore para que ejerza ciertas funciones. La gente no cuenta que el Concejo con autonomía y decisión no ha dejado caer lo del Inder, le solicitamos al Alcalde que eso fuera consecuencia de un estudio serio. Los acuerdos son pensados, analizados. El acuerdo que pasó el Alcalde, y el que salió, comparándolos, se puede ver las diferencias. No se hizo al pie de la letra lo que el Alcalde solicitó. No se han aprobado proyectos a ciegas, todo se está estudiando. Miren no más el Plan de Desarrollo, fue algo analizado y aprobado a conciencia. El ciudadanos tiene todo el derecho a escribir, pero respetuosamente.

Pueblo: Bajo este particular, de ciudadanos que hacen un legítimo control político –independiente de las formas en que lo hagan- como concibe usted el tema de la oposición en Girardota. En la manera en que se estructura el concejo, no se ve algo que se pueda denominar como tal. ¿Cómo juzga eso para la gobernabilidad del municipio?

Hernán Torres: Es importante trabajar armónicamente, coordinadamente y con un efecto de colaboración con la administración. Hago una defensa muy grande al trabajo de colaboración y coordinación que estamos llevando a cabo con la administración. Yo creo que eso es lo que manda la Constitución, sin perder la objetividad, ni el efecto del control político. Eso es lo que se está experimentando en el Concejo, y he encontrado eco y posiciones parecidas en otros concejales. Es una opción y posibilidad que no se puede perder en Girardota. El Alcalde es nuestro amigo y hermano en la parte administrativa. Es importante la posibilidad de pensar en forma distinta al gobierno. Todo ciudadano debe participar en el seguimiento, en el control del poder político. La cosa es con qué mecanismos. Hay cabildos abiertos, derechos de petición, audiencia pública, referendo. A los ciudadanos se han invitado a participar de las comisiones que discuten los proyectos de acuerdo, y paradójicamente ni siquiera los que firman el documento que distribuyeron, asisten. La participación y estas cosas son buenas, pero respetuosamente, respetando la ley  y la dignidad de las personas. Me siento indigno porque si mi hijo lee esto va a pensar que soy un arrodillado, un clientelista, un corrupto. Excelente que firmen, porque como ciudadanos los respeto, pero es la forma en que lo hacen. Yo ahí miro cierta orfandad política. Me encantaría que se hiciera un debate público  sobre eso, desde una perspectiva jurídico-política, y que nos den madera desde ahí. En la aprobación del acuerdo 007 me hubiera gustado que hubieran ido a decir por qué no lo podíamos hacer. 

Pueblo: ¿Qué percepción cree usted que tiene la ciudadanía del Concejo? Porque culturalmente las personas desconfiamos de los políticos. Siempre pierden la credibilidad, justificada, o injustificadamente. ¿La gente conoce los esfuerzos que, según usted, está haciendo el concejo?

Hernán Torres: Con toda honestidad, el Concejo desde mi dirección ha fallado en el aspecto comunicativo. Tenemos muchos logros en la parte administrativa. Estamos publicando los actos, implementado herramientas de participación. Hemos aprobado proposiciones que manda la ley con el debido proceso. Internamente son mejoras que redundan en beneficios organizativos del Concejo. Nos falta irnos a la comunidad, que nos confronten y nos vean.

Pueblo: Qué confianza pueden tener los ciudadanos de una reforma administrativa, cuando en años anteriores han sido para crear cargos para pagar cuotas, y en la práctica son cargos que hasta los mismos concejales ponen en tela de juicio, como fue el caso de las subsecretarías. ¿Qué garantías tienen los ciudadanos de que esa reforma no se va a convertir en eso que se está denunciando: que se van a crear solo para meter más gente?

Hernán Torres: Va a haber un proceso de comunicación permanente entre el Alcalde y el Concejo. La reestructura va a ser de acuerdo al requerimiento del Plan de Desarrollo, para poder llevarlo a cabo. El empleo público está definido como el conjunto de competencias orientadas a cumplir el Plan de Desarrollo y los fines del estado.   La Ley 1551 ya está ordenando a los municipios que solo creen la estructura que requiere necesariamente para cumplir con sus funciones. En teoría el Alcalde debe tener eso claro,  y algo importante, es que se busca es racionalizar trámites y evitar la duplicidad de funciones. Hay que esperar el comportamiento del Alcalde. Porque hay un mecanismo importante y es que nosotros nos reservamos el derecho de vigilar esa reestructura y  las audiencias públicas pueden ser utilizadas para que el Alcalde de un informe   a la comunidad de cómo va ese tema. Nos encantaría que la gente participe de eso, desde los mecanismos que dispone la ley.

  

Pueblo: ¿Al concejo no le temblaría la mano para romper la armonía y hacer el control político cuando sea necesario, si una situación lo amerita?

Hernán Torres: Me encantaría que eso pasara para que la gente viera que el Concejo y el Alcalde están en esa tónica. El Alcalde lo ha dicho mucho muy claro, que le gustaría que el Concejo hiciera un control político exhaustivo. A los secretarios les hemos dicho, que los vamos a llamar a control político. Tengo la firme esperanza que el Concejo empiece a actuar en bancadas,  y que comencemos a hacer control político como lo concibe la Constitución: eliminar cualquier presunción de mala fe, y de muy buena fe los secretarios vayan al Concejo sin miedo, demostrando que vienen cumpliendo su función. Hoy estamos trabajando así, quién sabe el año entrante que vienen elecciones de senadores, presidencia, uno no sabe cómo se pongan las cosas. Sería muy desgraciado que la parte política se anteponga al trabajo del Concejo. Yo le jalo a una unidad. Yo voy a trabajar por el proceso del Plan de Desarrollo. Nunca le he mandado una hoja de vida al Alcalde, no le he pedido un contrato, no le he pedido burocracia.  Yo ni sé si me quedo 2 o 4 años. Quería experimentar este proceso. Quiero demostrar que un Concejo trabajando y construyendo cositas puede hacer el control político.