1. Porque basta de que nos gobiernen mal. Y punto. Porque la conciencia es capaz de arrastrar multitudes proliferantes y generar otra opción de gobierno, nacida de la sed de transformar un estado de cosas podrido.
Anoche se “debatió” en el Concejo municipal el proyecto de acuerdo para cambiar la destinación de los recursos de un préstamo que hizo el alcalde para una cosa pero que ya necesita gastar en otra. Y se vio lo mismo de siempre: nada de debate. Quienes lo defendían, se enfocaron en el problema de seguridad y para ello se valieron de exposiciones más emocionales que políticas, que no respondían a las razones de quienes se opusieron a votar positivo el proyecto.