El agresor fue (Foto) Juan David Muñoz Valencia, oficial de construcción de Girardota, detenido durante la noche del sábado 28 de diciembre, por agredir a periodista, hoy libre.
Por Mauricio Hoyos Muñoz
Ayer recibí un puño en la cara que me dañó las gafas y me las enterró en la cara, cortándome con ellas el pómulo y la nariz. Recibí con amor el beso fraterno de la violencia doméstica. Me guardo el derecho a devolverlo, por este medio. Fue un golpe cobarde, lanzado desde la oscuridad, cuando no estaba yo encarando al agresor, el oficial de construcción Juan David Muñoz Valencia (tío y compañero tan amado de la infancia, un hermano mayor), por no querer aguantar la bulla que estaba haciendo su hijo (guaracha, la cosas más insoportable de todo el amplio espectro musical local, por su excesivo volumen, monotonía y estupidez, que solo puede soportarse bajo los efectos de alguna droga enervante, como el tusi), justo en frente de mi casa, en la vereda Juan cojo del Municipio de Girardota.